
· Economía
En la última semana, hemos sido testigos de un incremento significativo en la brecha cambiaria, un fenómeno que resalta las persistentes tensiones en la economía. Este aumento, que llevó la brecha a niveles del 56%, contrasta marcadamente con el 8% registrado a fines de diciembre. Este cambio refleja una depreciación real del CCL (Contado con Liquidación) del 135% en lo que va del año, marcando un retorno a los niveles observados en julio del año pasado.
La dinámica del mercado cambiario, caracterizada por un robusto flujo de divisas por parte de los exportadores, no ha logrado frenar esta tendencia al alza. Se estima que los exportadores están inyectando alrededor de USD 80 millones diarios en el CCL, a pesar de lo cual la demanda de divisas se mantiene fuerte. Este escenario se da en un contexto de tasas de interés real negativas, donde no tenemos instrumentos “baratos” para poder cubrirnos. La inflación, corriendo cercana al 20% mensual, también juega un papel crucial en esta dinámica, generando una considerable apreciación del tipo de cambio oficial, dada la política de crawling peg del 2% mensual.
Desde el punto de vista de la política monetaria, el Banco Central ha intervenido mediante la emisión de BOPREAL, con el objetivo de contraer la oferta monetaria y aliviar la presión sobre el CCL. Esta semana se emitieron apenas USD 340 millones, equivalente a $280.000 millones o 3% de la base monetaria. A pesar de todo esto, la persistencia de la brecha cambiaria indica que estos esfuerzos pueden estar resultando insuficientes.
En el frente político, la situación es igualmente compleja. Las sesiones extraordinarias del Congreso están por concluir, y con ellas, la incertidumbre sobre el futuro de la ley ómnibus y el Decreto de Necesidad y Urgencia. Aunque hay señales de colaboración por parte de bloques importantes como la UCR y Hacemos Coalición Federal, su apoyo parece condicionado a ciertas concesiones por parte del gobierno (El punto final en disputa son las retenciones). Para el quórum necesitan de 129 diputados y de 37 senadores. Esto añade una capa adicional de incertidumbre en un contexto económico ya desafiante.
Fotos: BCRA.