Sin salud mental, no hay amor propio [Columna]

El 10 de octubre, como todos los años, es el día mundial de la salud mental. Este día fue designado con el fin de tomar conciencia acerca de los problemas que esto conlleva y derribar los mitos y estigmas en torno a este tema.

Las enfermedades mentales no solo afectan a quienes lo padecen, sino también a su entorno que deben estar allí acompañando.

Es muy común acudir a un psicólogo cuando las cosas no vienen bien, momentos en donde te encontrás en un estado de angustia grande o con un problema en donde necesitas obtener herramientas y/o una mirada externa. Esto no debería ser así, cuidar nuestra salud mental es un trabajo diario.

¿A qué me refiero cuando digo “cuidar nuestra salud mental”?

Continuamente observo mi diálogo interno y veo que cada vez me trato mejor a mi misma. Pero esto no siempre fue así, antes me «machacaba» la cabeza cada vez que me equivocada. Me culpaba y ponía a los demás como prioridad.

Entonces, modifiqué el “qué mal esto que hiciste” por un “estás aprendiendo, la próxima lo vas a hacer mejor”. Detrás de ese diálogo un tanto castigador conmigo misma, pude notar que muchas de las heridas emocionales del pasado tenían que ver con esto. Tené en cuenta que todos las tenemos si no las resolvemos. Lo que no se trabaja, aparece e insiste. Ahí es cuando pude entender la importancia de tener salud mental. Sané mis heridas y cambié la relación conmigo misma.

Empecé a poner más límites, escucharme cuando no quería asistir a algún lugar, comprenderme más, dejar de culparme por todo y darme regalos, y creo que es uno de los mejores consejos que te puedo dar. Cuidá tu psiquis.

Sin salud mental, no hay amor propio.

Feliz día de la salud mental.

Fotos: Clínica Pueyrredón – Terapify.

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